miércoles, 26 de marzo de 2008

Pastilla Pauls

Lo cierto es que estamos un poco nostálgicos, sumado a la nostalgia que ya traemos como FAMILIA. Pero pasa en las mejores, o no?
Me gusta sentarme a pensar cuál es el punto exacto que tiene alguien que hace que otros alguienes se acomoden cerca, se unan en una nada apetecible, en un auto lleno de humo con música imposible a reir. Claudio en el viejo continente hace que el auto esté vacio y que cada uno de nosotros ande vagabundeando, pero, queridos hermanos, vagabundear es sumamente importante para disfrutar luego del encuentro, sino, en vez de familia, seríamos pareja, y recuerden: tenemos un legado, recuerdan? Nuestra querida abuela ¿que nos decía en las noches de humedad y televisión en blanco y negro?: "nunca se separen entre ustedes por fascinación ajena, por amores inconclusos, los hermanos sean unidos, si se casan, se olvidarán de lo único que tienen, que es a ustedes mismos"...
Pensando en esto, tirada en los pastizales de la vieja casona de Chunchuna... ( si, me invitó a mí, teníamos una deuda pendiente con un licorcito de mandarina que trajo un amigo desde Asia)... Me dispongo a disfrutar de esta nostlagia signada por el apellido que nos une, y espero, espero hasta el día en que me toquen el timbre, y nos vayamos al bar mas roto de la ciudad.
No dejen de escribir, tengo señal en los campos de la Tía.
Con cariño sincero...
Lila Pauls
P.D.: Si, hice lío, pero tranquilos, que me tomé la pastilla del día después.

viernes, 21 de marzo de 2008

Viejo Continente

Hola Familia!
Primeros días en Barcelona.
Después de cuatro días muy intensos, con el alcohol de compañero logré que la separación de mis queridos hermanos y primos sea mas llevadera.
La bienvenida fue extraña. Algunas cosas cambian, viejos cambios se acentúan, otras cosas siguen como siempre. Alguna gente bien, alguna gente mal y alguna gente, también, como siempre.
Como levantarse sin la posibilidad de que suene el teléfono y la voz de Mimí sólo diga Clo Clo? Es raro no tener que rastrear por la ciudad (por alguna fiesta desenfrendada) a la inquieta Lila. Pienso mucho en si Paul podrá superar su adicción a los caramelos de anís y a su agenda alocada de galán de antaño. No quiero ni pensar que Jean e Inesita pueden estar hechados en las hamacas del campo de Chunchuna, abrazados por los rayos de sol de un verano que se acaba en breve, o que Marité se este embarcando, cámara en mano, en una nueva cruzada para intentar salvar al mundo.
Acá en Barcelona pareciera que la gente juega a ser cada vez mas sofisticada, sin fijar la atención en la escencia de las cosas y las personas.
Si, dirán "Claudio volvió al absenta". No lo niego, pero es cierto que la abuela Stella Maris nos habló mucho de esencia esas noches cuando cuidaba de nosotros y disfrutaba citando a Dorian Gray. Hoy es un día donde el licor, las sustancias y el tabaco nublan mi mente asique me dejo llevar fácilmente. Entiéndanme.
Mañana parto a Berlín, la tierra del abuelo Helmut. Trataré de encontrar sus pasos. Trataré de seguirlos.
Un beso a cada uno de ustedes.
Los quiere,
Claude.

martes, 18 de marzo de 2008

Diario de Marlene

Como habíamos anunciado vamos a publicar el diario de Merlene que nos acercó un lector desinteresado.
Son hojas sueltas que sólo tienen una fecha.
Aquí va la primera que hemos podido transcribir, ya que la letra y la humedad hacen difícil la tarea.


17 de abril

Me desperté está mañana, no supe que era jueves hasta mas tarde cuando entró la señora Claire. Tres días durmiendo.
La señora Claire entró con unas pastelitos que ella misma hornea. Los hombres se habían ido hace ya dos días. Eran marineros. Dejaron los billetes en la mesa.
El cuerpo no me responde, se ve que en las noches en que dormía traté de llegar al baño y no pude. La señora Claire limpia con un balde el suelo.
Llegó otra carta de Buenos Aires…
Alguien me ama, no lo conozco.
Vuelven las pesadillas, toda clase de criaturas me arañan, me sujetan, me hundo.
Voy a la rue du Sentier, entro, son raros los sótanos en París. Tengo que esperar y me desespera. Primero me piden la plata. Tres minutos después desaparecen los monstruos.
Me duelen las piernas, de hecho las siento ajenas.
Este gordo suda arriba mío. Grita mucho. Le pongo la mano y trato de taparle la boca.
Me muerde e intento sacármelo de encima. No tengo fuerza.
Lloro.
Se va.
Sigo llorando.
El techo aparece pasado por agua.
Se parece al de mi casa. Cuando lloraba de niña me refugiaba en la habitación de mi madrina. Nunca entendí porque vivía en nuestra casa. Yo jugaba a que ella era mi madre. Una tarde entré a su habitación para probarme sus alhajas dormía junto a mi padre.
La señora Claire, está viuda. Su marido murió en Lorena, hace un par de años.
Me trae pasteles porque me ve delgada, piensa que estoy enferma.
Ya no uso el espejo del cuarto no lo necesito.
Que hacen los marineros en París?
El puerto está lejos, quiero ir al mar pero no al sur. Quiero ir al norte.
Hace mucho frío.
Igual.
Quiero ir al norte.

lunes, 17 de marzo de 2008

Like a rolling Pauls

Extraño la unión de mis hermanos, ahora que Claudio Pauls salió del país.
Hoy es lunes y
Lila Pauls estar melancólica y alcohólica,
Claudio Pauls estar en el aire literalmente,
Mimí Pauls estar resolviendo problemas concretos,
Jean Pauls estar queriendo irse,
por suerte Paul Pauls estar meditando...

Que no se corte, muchachos!